Descripción
Este hermoso edificio novecentista fue, entre los años 30 y 80, la escuela de la población. Fue construido gracias a la donación de Antoni Figueras, veraneante de la población, en recuerdo a su hija Caterina.
El acceso principal tiene unos porches cubiertos sobre arcos de medio punto, lo que potencia la monumentalidad de los edificios. El porche está coronado con un escudo del reinado de Alfonso XIII, modificado más tarde. Como complementos decorativos, las fachadas muestran en la parte alta una serie de esgrafiados donde se presentan diversas actividades infantiles. Estos grabados fueron diseñados por el grabador y pintor Manuel Puig y Genís.
A destacar: La importancia volumétrica de los dos cuerpos y del juego obtenido por los diferentes planos de cubiertas; la decoración de las fachadas así como el resultado de la restauración, que ha devuelto al edificio toda su belleza original.