Descripción
En su origen, este núcleo era un castillo que controlaba el estrecho paso del valle. Documentado desde el año 1070, hoy no hay restos visibles. Encontramos esta bonita iglesia románica sobre los viejos bancales de cultivos. Capilla de estilo románico, una sola nave con ábside y bóveda de cañón. El ábside fue sustituido por un gran presbiterio redondeado, cerrado por una reja de forja; dice la tradición que se forjó en la antigua fragua del Catllar (mencionada desde el siglo XVII) que había bajo el peñasco.
El sitio de Vilallonga de Ter está documentado desde el 1011. En su término tenían propiedades el monasterio de Ripoll y el de Camprodon, pero eran señores la familia Catllar o Descatllar, señores del castillo del Catllar, una de las familias más importantes del Principado en los siglos XIV y XV.
El santuario se conoce desde el siglo XII, primero dedicado a San Pedro y luego a Santa María del Catllar.
El santuario despertó en tiempos pasados mucha devoción en la zona, y tuvo un sacerdote beneficiario y muchas reliquias. Actualmente sólo se oficia una vez al año.
Al extinguirse el linaje de los Catllar, en 1789, podría ser que los nuevos propietarios emprendieran la restauración del santuario con las transformaciones barrocas que han perdurado hasta ahora.
Recomendamos disfrutar del lugar y dar una vuelta por la ribera del Catllar arriba. Respetad la propiedad privada!