Introducción
Hemos atravesado el fondo de la Vena y nos encontramos en medio de la umbría, en un rincón más sombrío donde se pueden ver, con mucha más frecuencia y en cantidad, valiosos musgos cubriendo grandes extensiones del suelo del bosque. Estos musgos ayudan a retener y a mantener un grado de humedad vivificante. En otoño, se pueden hacer buenos níscalos.
Sin embargo, son umbrías de transición, ya que todavía arraiga y se deja ver con gran profusión el carrizo (en la foto), también conocido por cañeta o cisca, una especie no muy frecuente en el Principado por más que propia de lugares bastante soleados. Ya lo veis, la naturaleza tiene a veces estas indeterminaciones: ¡a menudo la frontera climática es tan tenue ...!
Acompañando el carrizo seguro que encontraréis enebros y lentiscos, incluso alguna sabina (familia de los cipreses), todos ellos resinosos y, por tanto, altamente inflamables.