Caminata de castillo en castillo

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Blanco, rojo y negro

Ruta exigente en el extremo oriental del macizo del Garraf. Espacio declarado Parque Natural en 1986 por sus valores naturales y culturales.

En un Garraf dominado por el blanco, en este recorrido descubriremos el rojo y el negro. Hablamos de geología, de piedras y de tierra que condicionan un relieve característico y, al mismo tiempo, un paisaje vegetal propio. Un paisaje también humano, que nos descubre una serie de masías, capillas y castillos, conectados por caminos medievales.

Empezaremos subiendo el collado de Santa Maria, pasando por masías reconvertidas y recuperadas para nuevos usos educativos y turísticos (como Cal Gancho) y otras en ruinas (como Can Gall). En primavera nos acompaña una broza florida con palmito. Es el llamado "Garraf blanco".

Sobre el collado nos hacemos una idea del recorrido de la ruta. A la derecha la sierra de Can Perers, relieve conocido como La Dona Morta (literalmente, la Mujer Muerta), la montaña del fondo y el castillo de Eramprunyà que nos espera. A nuestra izquierda el valle de Joan, con el antiguo vertedero del Garraf.

Bajamos entre carrizos (Ampelodesmus mauritanica) para ir a buscar la entrada del valle de la Sentiu. En esta parte baja del recorrido, pinos, robles y encinas, aunque presentes, nos hacen sentir la protección del bosque. Pasamos otra vez por el lado de masías en ruinas a pocos metros del camino (como Can Sopes) y otras todavía vivas (Can Vinyes y Can Pardal) que hay que respetar. Al lado de Can Dardena encontramos una conocida con el nombre de Torre de la Sentiu que fecha del s. X. Bancales y campos de almendros y algarrobos se han quedado parados en el tiempo. La balsa y los robles de Dardena son un rincón fresco agradable.

Ahora, remontamos el torrente de Les Canyes por un sombrío sendero dentro del encinar hasta llegar a Can Flocant (en ruinas). Bonitas vistas del fondo salvaje con Les Agulles arriba de todo. Aquí comienza "el color rojo". Una fuerte subida por el camino medieval nos acerca al castillo de Eramprunyà. Antes, sin embargo, en los momentos de reposo, disfrutaremos de fantásticas vistas del valle con todas las masías que hemos ido pasando. Al otro lado observamos la umbría de la sierra del Perer y, mirando hacia arriba, el perfil más elevado del macizo (Morella, Agulles, Desfeta y Eramprunyà). La vegetación es arbustiva de tamaño grande y hay que destacar la presencia del madroál combinado con brezo. En algunos tramos pasaremos por debajo.

Pasando los escombros de Can Bassoles (masía medieval) por una cómoda pista entre madroños, por debajo de la cima de la Desfeta (torre de vigilancia forestal), llegaremos al castillo de Eramprunyà. Este entorno de Bruguers, por sus riscos y formaciones geológicas, por la capilla de Bruguers (s. XI) y el castillo de Eramprunyà, se merece una visita aparte.

A continuación, por el fondo del torrente de Les Comes, de nuevo escondidos dentro de un encinar lleno de enredaderas (zarzaparrillas) y hiedras por tierra, descubriremos el "color negro". Las pizarras se ven en el suelo y en los márgenes del camino que ahora, al salir del torrente, se rodea de pinos, brezos y coloridas estepas, para ir bajando hasta la Sentiu, al lado de Can Llong.

En breve, cruzando el torrente y después de la última subida llegaremos al castillo de Castelldefels.