Introducción
La iglesia románica del s. XII es cubierta con bóveda de cañón apuntada, y el ábside con bóveda de cuarto de esfera. Si lo miráis por fuera, el ábside está decorado con una cornisa moldurada con botones y un friso con motivos geométricos bajo el alero del tejado. En el centro se abre una ventana abocinada, adornada con una arquivolta con tracería sustentada por dos columnas con capiteles que presentan figuras de pájaros, en el exterior. Los diferentes colores del material hacen pensar en modificaciones de diferentes épocas.
Hay una pila de agua bendita del siglo XVII, decorada en el exterior por acanaladuras que dan lugar a una forma cercana a la concha, propia de la época.
Fuera, podéis ver el "comunidor". Era una pequeña construcción, cubierta y expuesta a los cuatro vientos. Siempre junto a las iglesias, sobre todo en la zona de los Pirineos y Prepirineo. Los lados del falso altar estaban orientados a los puntos cardinales. Servía para "comunir" (invocar ayuda con conjuros) ante las tormentas u otras calamidades. Era un acto pagano, cargado de folklore ancestral, en la fe cristiana, por lo que muchos se derribaron y hace siglos que se dejaron de utilizar.
En la escalinata del patio posterior al ábside y bajo la casa de la rectoría se conservan diferentes tapas de antiguos osarios. La rectoría tiene en el lado de poniente un interesante pozo fechado en 1690.