Introducción
Nos encontramos en un cruce destacado del camino: a mano derecha encontramos un paso hacia la riera de Fuirosos, y a mano izquierda hay un vado que permite atravesar el río, cuando lleva poca agua, para llegar a Breda. Además, el entorno es bastante peculiar; esto se debe a la actividad que desarrolla el vivero Cultivos Ponç.
Si caminamos por el interior del vivero, a los pocos metros nos veremos rodeados de olivos milenarios, de coníferas, de palmáceas y de árboles de alineación, todo ello a tocar del valle de la riera de Fuirosos, una de las más representativas de este lado del Parque Natural del Montnegre y el Corredor.
La riera de Fuirosos lleva agua todo el año de manera casi permanente. Sus laderas son densamente cubiertas por alcornocales, encinares, pinares de pino piñonero, castañares, robledos de roble albar, de roble pubescente y de roble africano, avellaneros, aliseras, fresnedas y otros bosques mixtos húmedos con álamos temblones y cerezos. Este es uno de los motivos por el cual el valle de Fuirosos es considerada uno de los lugares del Montnegre con más valor ecológico.