Introducción
Desde el principio de la ruta, cada vez que mirábamos hacia el pueblo de Sant Pere de Torelló seguramente veíamos cómo destacaba un campanario, el de la iglesia de Sant Pere, una referencia para todos los vecinos. Construida hacia el s. IX no fue hasta el siglo XVIII cuando el arquitecto Vic Josep Morató la remodeló convirtiéndola en un monumento del arte neoclásico. La iglesia románica tenía en sus inicios tres ábsides, cada uno de ellos con su respectivo altar. Estos altares están dedicados a San Pedro, el central, y a Santa María y a un santo mártir, los laterales. Durante la Guerra Civil el altar se quemó. Solo se salvó la figura de San Pedro que hoy en día se halla en el Museo Episcopal de Vic.
El campanario es una torre de cuatro pisos con un reloj público colocado en 1864 que se sustituyó en 1963. Hasta principios del siglo XX la torre acababa con un tejado triangular de madera.