Introducción
La esclusa del mas Canyà servía para llevar el agua del río hacia un molino de harina del centro de la ciudad. Se observa aún el comienzo del riego donde se situaban las compuertas para regular el agua. Las dimensiones considerables son un testimonio de la importancia que tenía el agua del Daró siglos atrás. El río era fundamental por los molinos, pero también para otros usos como el de los curtidores y sazonadores, que remendaban las pieles y las aclaraban con agua del río. También era el lugar de reunión donde las mujeres lavaban la ropa y hacían tertulia. Siglos atrás, se cree que el Daró tenía un caudal mayor al actual y que era más regular, lo que favorecía estos usos.