Introducción
Los prados de siega son hábitats seminaturales con una rica biodiversidad. En estos prados encontramos gran variedad de especies vegetales, mariposas y una eleva fauna insectívora asociada, que a la vez sirven de alimento de algunas aves. Se trata de hábitats con un alto interés de conservación a escala europea.
Estos prados tienen un aspecto cambiante a lo largo del año. En primavera son altos y exuberantes, y en invierno son rasos. La hierba dallada sirve para alimentar al ganado durante el invierno, y al final de verano y en otoño los prados son aprovechados por pastos.
La importancia ecológica de estos prados no radica sólo en su biodiversidad, sino que también es importante en la prevención de incendios.