Introducción
Entramos de nuevo en el dominio forestal del bosque de pino negro con alguna mancha de abetos.
Encontraremos setas comestibles como los rebozuelos y las colmenillas en primavera, los boletos más en verano y los níscalos a continuación. También en verano, nos parecerá oír ladrar un perro entre los árboles, que resulta ser el reclamo del macho del corzo en época de celo.
Por los alrededores, puede ver pilas de pinocha, que son la protección térmica de los hormigueros que hay bajo tierra. Un dicho relaciona la altura de la pila con la previsión del invierno que vendrá.
El nombre de carbonero nos indica que estos bosques de pino, antiguamente se habían utilizado para obtener carbón vegetal para alimentar las fraguas de hierro del valle.