Puente de L'Afrau

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Un acueducto entre pinos

Iniciamos el recorrido donde el torrente de Pallarès se une al río Negre. La pista en dirección a la urbanización de la cabanya de El Geli nos lleva río Negre aguas arriba.

El primer tramo del itinerario transcurre siguiendo la orilla del río Negre, acompañados de plátanos de sombra, fresnos y algún chopo itálica. La zarza domina los márgenes del río. Hábitat propicio para pájaros y pequeños mamíferos.

Pronto pasamos por la fuente de El Corb. Después de la hípica, el río propicia un rincón donde chopos, fresnos y algún sauce blanco confieren un notable ambiente de ribera. Al cruzar el cauce, en un tramo de subida encontramos una pequeña alineación de encinas a nuestra derecha. También aisladamente, algún nogal, un serbal y un espino blanco.

Seguimos por un fantástico sendero a la sombra de pinos y entre bojes y cornejos. Parece sin embargo que estemos caminando por el cauce del río. Enseguida lo atravesamos para tomar el camino que recorre la cárcava de Cirera. Nos vamos aguas arriba, dirección al puente de L'Afrau.

Ahora, el paisaje que nos rodea, salvo la fina línea de agua de la cárcava de Cirera, es un bosque de pinos mixto donde conviven el pino rojo y la pinocha. Bosque que queda inscrito dentro de los vertientes poco accesibles entre los campos de cultivo de las partes altas y el fondo de la zanja.

El puente de L'Afrau es un acueducto monumental de 27,5 metros de altura y unos 60 metros de largo, de mediados del siglo XVIII, que servía para llevar el agua desde Lladurs hasta Solsona.

La vuelta se hace por dentro del bosque y, más adelante, entre masías, por la pista asfaltada que baja hasta la urbanización de la Creu Blanca, y hasta Solsona. Vamos por la cresta y esto favorece buenas vistas sobre el mosaico agroforestal primero, y la transición hacia el dominio de los campos y el monte de Castellvell después.