Introducción
Se construyó entre 1714 y 1717 gracias a la donación del pescador Baltasar Rabassa que fue el primer ermitaño, y a la ayuda de los pescadores del pueblo.
De una sola nave, tiene tres tramos aparte de la cabecera, con cubierta de cañón. A ambos lados se levantan unos cuerpos añadidos más bajos, que le dan un cierto aspecto de masía.
El retablo actual es de 1906 y fue restaurado durante la década de los años cuarenta del s. XX. Durante la Guerra del Francés sirvió como cuartel para las tropas, sufrió destrucciones importantes, lo que se repitió durante la Guerra Civil, con la destrucción de gran parte de sus retablos, uno de los cuales está en el Museo Marítimo de Barcelona.
Junto a la ermita de Sant Antoni hay una antigua torre de vigilancia. En la actualidad funciona como centro emisor de diferentes frecuencias de radio.