Descripción
Este es otro de los castillos que mantienen su casi total aislamiento, por lo que se puede visualizar en prácticamente toda su interesante estampa. El hecho de que esté emplazado en lo alto de un cerro, lo hace bastante visible desde la llanura cercana. Su origen es una fortaleza del siglo XI, momento álgido de lucha contra los sarracenos, pero la estructura actual corresponde a unas reformas hechas en los siglos XIV y XV para adaptarlo a las mejores comodidades de las residencias aristocráticas, en este caso de los Vergós.
El lugar se complementa con la presencia de la capilla románica, constituyendo uno de los conjuntos más emblemáticos de la zona.
Sólo visitable exteriormente, pero es un bello ejemplar muy bien conservado.