Introducción
Fijaos que las encinas que encontramos alrededor tienen dos o más pies que salen de la misma cepa. Esto nos indica que el tronco principal fue cortado, provocando efecto sobre la encina, lo que facilitaba un crecimiento más rápido de estos pies que se iban cortando alternadamente para su aprovechamiento, sea como leña o para hacer carbón. Si nos fijamos en el color ennegrecido del suelo en el trozo más plano del bosque, tendremos una pista de la presencia de una plaza carbonera en este trozo de bosque.
El carboneo consistía en transformar la leña en carbón mediante una combustión incompleta. El proceso de carbonear comprendía varias fases, como la de corte y recogida de leña, la construcción de la pila, el encendido, la prisa, la saca y el desembosque. El proceso de carbonización podía durar entre una semana, las más pequeñas, y dos meses, las más grandes, y un mismo carbonero podía hacer 7 u 8 carboneras a la vez.