Introducción
Estamos en una de las cuatro pozas más conocidas de la riera de Clarà. Sus alrededores son forestales con pinares secundarios de pino negral y pino blanco, o encinares de hoja pequeña con boj en el sotobosque. A ras de agua, sin embargo, podemos hablar de vegetación de ribera, donde los árboles más representativos son los sauces, chopos, olmos, fresnos, alisos y robles, alternados con zonas de prados y praderas que a la vez se combinan con herbazales higrófilos.
La fauna vertebrada está muy bien representada con una comunidad de carnívoros bien conservada como la garduña, la gineta o el jabalí. Hay que hacer referencia a la presencia de fauna exótica como el visón americano que se puede observar cazando cangrejo también americano.
En cuanto a pájaros forestales podemos ver verderones, trepador azul, pico picapinos, palustre o herrerillos; las rapaces visibles en espacios abiertos como el ratonero o el cernícalo; y en zonas de agua la garza real, garceta, pollas de agua o el ánade real son los más comunes. Las especies de peces que se localizan en algunos tramos del arroyo son la tenca, el bagre común y el barbo de montaña, este último localizado bajo los saltos de agua de algunas de las pozas del arroyo.