Introducción
El domingo 10 de agosto de 2003, fiesta de Sant Llorenç, a las 16:00 p.m. se declaró un incendio forestal en el valle de Horta. Seis días después había quemado 4.600 ha y había provocado la muerte de cinco personas de una misma familia. Años después, desafiando la erosión y con pluviometrías no siempre favorables, la vegetación lucha por recuperarse.
La vegetación de matorral como el junquillo (Aphyllantes monspeliensis) y la albaida (Dorycnium pentaphyllium), y el estrato arbustivo como el emborrachacabras (Coriaria myrtifolia), el jaguarzo blanco (Cistus albidus), el romero (Rosmarinus officinalis), la amarguera (Bupleurum fruticosum) y, sobre todo, el brezo de invierno (Erica multiflora); crecen en medio de algunos pinos carrascos (Pinus halepensis), rebrotes de robles (Quercus cerrioides) y encinas (Quercus ilex).