Introducción
Nótese como el bosque se cierra sobre nosotros. Hemos entrado en el dominio del encinar. Bosque que siempre lo encontraremos verde, con las encinas de poca altura pero tan densas que casi no dejarán pasar los rayos del sol. Son pequeñas porque muy probablemente estuvieron cortadas y aprovechadas para hacer carbón y sacar leña. La capacidad de rebrotar del árbol, hace que este aprovechamiento fuese habitual en la mayoría de encinares de montaña de nuestro país.
Más adelante encontraremos un pinar joven. En las zonas alteradas, quemadas, con presión de rebaños de pasto o, donde antiguamente había viñedos, una vez se abandona la actividad o se para la presión, el ecosistema vuelve a su proceso de sucesión natural. Primero los arbustos, después pinares jóvenes y más tarde los pinares viejos dejarán lugar en el encinar que volverá a recuperar su espacio. Esto nos cuenta que estamos ante una evolución del bosque; donde antes habían viñedos y campos, con su abandono, la vegetación natural ha recuperado lo que era suyo.