Introducción
Esta era antiguamente una zona de ocio, donde el agua del Daró era abundante y mucha gente se bañaba o también pescaba. Desde aquí se puede apreciar una de las mejores estampas bisbalenses, cuando con el río lleno, se puede ver el campanario y el castillo reflejados en sus aguas. Al tratarse de la parte final de un meandro, la zona ha tenido históricamente problemas con las inundaciones. Por ello en 1932 se construyeron unos muros de contención con gaviones (jaulas de malla de alambre rellenas con piedras), que más tarde, en los años 60, se tuvieron que rehacer. Morfológicamente el aspecto de la zona ha cambiado mucho, pues el actual terreno donde está la arboleda de plátanos se ganó al río cuando se construyeron los muros de contención.