Introducción
Los topónimos o nombres de lugar que hacen referencia a los moros o los judíos denotan que, para los habitantes del entorno, se trataba de estructuras muy antiguas.
Analizando topográficamente el lugar se descarta que pueda tratarse de una torre de control, ya que no tiene buena visibilidad. Gracias a los datos obtenidos de una excavación arqueológica ahora sabemos que se trata de los restos de un edificio termal de tipo doméstico y rural asociado seguramente a una villa la romana (siglo III-IV).
Se sabe que era un edificio dedicado al baño por su pavimento en opus signinum (hecho de barro triturada y argamasa) que es resistente e impermeable, por el hallazgo de canalizaciones de cerámica, los tubuli, y porque tenía un praefurnium (horno, para calentar el agua y las habitaciones). En total son 33m2 y consta de tres dependencias.
Las villas las romanas eran unidades productivas. Estructuralmente estaban formadas por una parte residencial o pars urbana y una parte fructus o rústica dedicada específicamente a la elaboración de los productos del campo. Esta segunda parte la constituían almacenes, prensas de aceite, establos, bodegas, graneros, despensas, etc Fuera de la villa solían existir también otras construcciones como eras, estercoleros, balsas, huerto, hornos y molinos.