Introducción
Antigua ermita construida por los monjes del Monasterio de Sant Feliu en el siglo XVIII. Fue renovada completamente por el abad Massalvà entre los años 1781 y 1785. La ermita tiene aproximadamente 1149 vessanes (1 vessana son 2.188 m2), tenía sus propios gozos (cantos populares religiosos) y en la que se celebraba cada año un encuentro popular. La desaparición de la vida rural y religiosa de estas montañas ha significado también su abandono.
Actualmente, la masía está en ruinas pero aún se pueden identificar fácilmente partes de la casa, como la gran chimenea de la cocina o el lavadero con desagüe en el exterior. Se conservan gran parte de los muros exteriores y las principales paredes de la masía.