Descripción
La iglesia de obra románica tenía en sus inicios tres ábsides, cada uno de ellos con su respectivo altar.
En el siglo XVIII el arquitecto de Vic Josep Morató fue el encargado de las obras de remodelación convirtiendo la iglesia de Sant Pere en un monumento de arte neoclásico con trazas de barroco.
Una nave de proporciones justas constituye el elemento principal del edificio, en el que no faltan buenas capillas laterales y un presbiterio grandioso, cuya bóveda recuerda aún las ojivas góticas. Es comenzado en 1727 e inaugurado en 1764.
El campanario es una torre altísima con un reloj público colocado en 1864 y que fue sustituido en 1963.
Presidía el interior de la iglesia el altar mayor, de estilo barroco y procedente de los talleres del escultor de Vic Vicenç Real, el cual dejó la fecha de 1788. A consecuencia de la Guerra Civil (1936-1939) el altar fue quemado y solo se salvó la figura de San Pedro que se encuentra en el Museo Episcopal de Vic.