Introducción
Disfrutamos de las vistas desde el norte lejano del Puigmal hasta el macizo del Canigó. Abajo, el valle de Hostoles con Sant Feliu de Pallerols y la llanura d'en Bas. Estamos en el límite este de la meseta de Collsacabra.
Buen punto de observación forestal de rapaces sobrevolando las copas del hayedo.
El lugar donde se levanta el santuario fue durante siglos el lugar de cruce de dos caminos reales, el de Vic a Amer y el de Rupit a Sant Feliu de Pallerols.
En 1642, Joan Carbonés, agricultor de una masía cercana, colocó en una cueva de la roca de Claperol una pequeña imagen de la Virgen. Eligió este lugar porque era muy frecuentado por los viandantes y porque dominaba todo el valle.
La devoción popular fue aumentando de tal manera que, un año después, Carbonés levantó allí una pequeña capilla. Desde ese momento, el santuario se fue agrandando hasta que en el siglo XVIII se comenzó la construcción del templo actual y la del hostal, con ampliaciones posteriores los años 1832 y 1847. En 1862 se hizo la bendición de la nueva fachada neoclásica de la iglesia.
En 1939 se abrió la carretera que sube hasta el santuario, cuya construcción llevó a cabo el dinámico y conocido cura "Llampec", mosén Miquel Bruns, que fue capellán custodio durante 25 años seguidos.
Fuente: blog Fermuntanya de Josep M. Camprodon