BARRACAS DE VIÑA DE CAN TORRELLA

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Antiguos vestigios del dominio de la viña

Empezamos esta breve ruta justo al inicio del camino que lleva a la antigua masía de Can Torrella. La entrada con vehículo a este camino se complicó un poco debido, ya hace años, a la construcción de los accesos a la población de Vacarisses desde la carretera C-58. La entrada sólo se puede hacer por el carril que entra en Vacarisses viniendo de Castellbell i el Vilar, a la derecha, ya que desde el carril que sale de Vacarisses dirección Terrassa, una línea continua no nos permite el giro a la izquierda, no en vano, ya que estamos justo a media curva del acceso a la carretera principal, con una visibilidad muy reducida. Una vez en el camino, sin embargo, justo antes de que éste atraviese el puente la autopista C-16, tendremos que dejar el vehículo, justo en un rincón a la izquierda donde este se ensancha un poco, ya que el acceso motorizado hasta la masía no es permitido.

Empezamos la ruta pasando justo por delante de la masía de Can Torrella, sin duda una de las de más historia de la zona, muy cerca del histórico camino real que desde Terrassa va hacia Montserrat, antiguo camino de peregrinación. A continuación bordearemos los llamados campos de Can Torrella, hoy destinados al cereal, para adentrarnos más adelante a las malezas del pequeño valle de uno del conjunto de torrentes que bajan de la zona hacia formar decididos la riera del Palà. Durante este recorrido disfrutaremos de unas bellas vistas hacia el macizo de Montserrat, hacia el oeste, y la sierra de Can Torrella, al sur.

En breve toparemos con la primera de las barracas del recorrido, una de las llamadas del Sot de l’Aigua, concretamente la II, suponemos que de nombre de nueva denominación a efectos de su catalogación a la Wikipedra. Muy cerca, tenemos la segunda barraca, llamada del Abellaire. Ahora el camino, de nueva apertura, se convierte en un sendero que bordea el torrente, pasando por la tercera de las barracas, la de los Caçadors.

Cruzamos el torrente y cambiamos el sentido de la marcha, ahora subiendo brevemente por su vertiente izquierda. Mientras subimos pasaremos por dos barracas más del conjunto que llevan por nombre del Sot de l’Aigua, la X y IX, respectivamente. El camino, a veces un poco perdedor, nos deja a los pies de un pequeño campo y de la sexta barraca del recorrido, la del Cubano. Y poco antes de cerrar el círculo y volver a recuperar el camino de la ida, aún podremos ver la séptima barraca del día, la del Sot de l’Aigua III.

Ya sólo tendremos que deshacer el tramo de camino que ya habremos hecho a la ida para dar por terminado el breve recorrido de esta interesante visita a este remoto rincón de Vacarisses.