Introducción
Los restos de la Roses visigótica
Este breve itinerario de ida y vuelta nos permite, a través de un breve paseo apto para todos los públicos, llegar y conocer un poco mejor el Castrum Visigótico o el poblado del Puig Rom, seguramente unos de los restos visigóticos más significativos de la península Ibérica. Subiremos observando estos rodales caracterizados por los brotes salpicados de encinas y pinos así como algún cultivo de olivo y viña que aún sobreviven en las partes más llanas.
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TipologíaCircular horario
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DificultadFamiliar
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Duración50 minutos
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Pendiente120.00 meters
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Distancia2.70 km
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TemaMedio ambienteArquitectura y medio
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ActividadA pie
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Valoración
Gráfico de pendiente
Descripción
Los restos de la Roses visigótica
Empezamos la ruta enfilando ligeramente por una amplia pista fregando un viñedo y un olivar, enmarcado con bonitos márgenes de piedra seca. Pasaremos fregando también una balsa artificial de riego.
Nos sumergimos en un paisaje de brote mediterráneo salpicado de pinos y alcornoques, ganadas y conformadas a partir del abandono de los bancales de cultivo y de la más que posible incidencia de algún incendio forestal, con abundancia de afloramientos rocosos evidentísimos. Más arriba, se evidencia también la limpieza o pasto sistemático de la vegetación de la zona, tanto, seguramente por el mejor lucimiento de la colina con los restos del poblado como por la proximidad de estas laderas con una de las urbanizaciones de Roses, que hay que poder proteger de los más que posibles incendios forestales de la zona.
Siempre en suave ascenso, nos podremos ir parando a observar de muy de cerca algunos ejemplares de alcornoques y pinos considerables, donde gozaremos además de su sombra provincial en estos parajes tan sufridos a la radiación solar.
En poco rato habremos alcanzado la base del Puig de les Muralles donde se esparcen los restos de muros y otras estancias del poblado de Puig Rom o Castrum Visigótico. Podremos subir hasta la parte más alta del promontorio, poder observar gran parte de sus restos y evidentes excavaciones, así como darle la vuelta por la base a través del amable y aéreo caminito de ronda, ya que desde las vertientes sudeste y noroeste, nos ofrece una gran vista panorámica del golfo de Roses, parte del Alt Empordà y montañas circundantes.
Después de distraernos un buen rato por esta muestra arqueológica de la historia de Roses y el Empordà, volveremos al punto de salida deshaciendo el mismo camino que hemos hecho de ida, ganando nuevas perspectivas, ahora del paisaje de las próximas peladas crestas que conforman los primeros contrafuertes del Cap de Creus.
Consejos
TRAZADO
- Trazado breve, en suave ascenso pero sin ningún tipo de dificultad.
AGUA
- Llevad agua: ¡no hay ninguna fuente en todo el camino!
PRECAUCIONES
- En la zona de las ruinas del Castrum, tened cuidado de los niños, ya que hay muros y agujeros por los que podrían caerse.
METEO
- Hay que evitar los momentos de máxima insolación. Casi no hay sombra.
- En todo caso, protegeos siempre con crema solar. El terreno es bastante soleado.
- Se trata de una zona donde a menudo sopla la tramontana. En caso de que sople muy fuerte, no se recomienda salir al aire libre. Además de que es peligroso para nuestra estabilidad, pensad que tampoco acabaréis de disfrutar suficientemente del momento, por las molestias que ocasiona el fuerte viento.
TERRENO
- El terreno por el cual se camina no presenta ningún tipo de dificultad, iremos todo el rato por camino cómodo.
MATERIAL
- En caso de viento, se recomienda el uso de chaqueta cortaviento.