Introducción
El pelador, antes de pelar el árbol, le "pide permiso", que significa comprobar si es un buen momento para el árbol. Lo hace golpeando el tronco. Según el sonido que hace significa que el árbol está suficientemente hidratado y que se puede pelar.
Primero hace la "corona" en el tronco (corte que rodea la parte superior del tronco), luego hace la "glenxa" (corte longitudinal paralelo al eje del tronco), a continuación pone el mango del hacha en el corte para hacer palanca y arranca el corcho del tronco, desnudando el árbol.
A continuación llega el "burricaire", el encargado de llevarse las "hojas" de corcho y "pintar" los troncos desnudos para protegerlos y evitar enfermedades. Por eso los árboles toman este color oscuro que vemos (foto).
Se hace cada 10 o 12 años.