Sallent

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Al norte de El Bages

Sallent es un municipio situado al norte de la comarca de El Bages, entre el valle del Río Llobregat y las mesetas de Ridor, Serraïma y Serra-sanç y gran parte de la extensión hacia el norte, aproximadamente, del Valle de Cornet hasta el su límite con el término de Gaià. El término es uno de los más grandes de la comarca, resultado de la suma del núcleo histórico de la villa y sus agregados de Cabrianes y Sant Ponç con el término de Cornet y las antiguas cuadras de Serraïma y Serra-sanç, agrupando unos 6.600 habitantes (2018).

En terreno plano, y al abrigo de la Serra del Xipell, a la izquierda del río y bajo la protección del castillo feudal, nació la villa de Sallent. El núcleo original sería la parte protegida de la Iglesia de Santa Maria (documentada desde el siglo XI), filial de la primitiva parroquia de Sant Esteve del Castell. El vestigio arqueológico más importante es el Poblado Ibérico de El Cogulló, localizado en el plano superior de la colina de este nombre.

Las minas de sales potásicas que se descubrieron en el subsuelo de Sallent, y las instalaciones hechas para su extracción, han sido causa de una gran transformación del paisaje y del panorama humano. La tradición industrial de la villa, de raíces muy profundas y concretada durante varias centurias en la fabricación de paños de lana, en el siglo XIX evolucionó hacia la especialización algodonera de hilados y tejidos, que fue la más importante hasta bien entrado el siglo XX.

Las terrazas fluviales del sector central del municipio, los llanos de Cabrianes y de La Sala, el valle de Cornet y las mesetas del lado oriental (Serra-sanç y Serraïma) son tierras dedicadas al cultivo. Como pasa en todo el Bages, la agricultura ha experimentado cambios muy importantes, que se manifiestan sobre todo en el abandono de la viticultura, el incremento de la producción cerealística y la proliferación de las actividades agropecuarias, principalmente la cría de aves y cerdos. Los bordes de los ríos, de los arroyos y de la acequia de Manresa son aprovechados para la agricultura de regadío y por los pequeños huertos familiares, donde también encontramos recortes del antiguo bosque de ribera de álamos, olmos y fresnos. Entre los campos, en los peores suelos, quedan manchas de bosques secundarios de pino blanco. En las montañas y laderas, los márgenes de piedra y las barracas de viña son el testimonio de la extensa ocupación de este cultivo hasta finales del siglo XIX, hoy abandonado y ocupado por el romeral con bosque de pino blanco. En los bosques, todavía encontramos alguna encina salpicando las solanas, o algún roble en los pinares de las umbrías.

Los acontecimientos festivos más arraigados de Sallent son las Enramades, por Corpus, y las Caramelles, en Pascua.