Introducción
Dólmenes y menhires en el pla de la Casa Cremada
Este breve itinerario circular comprende la visita a diferentes espacios funerarios prehistóricos y expresiones culturales de época neolítica de las comunidades campesinas que se establecieron en la zona del pla de la Casa Cremada.
Por otro lado, en esta ruta destaca también la presencia de construcciones de piedra seca, un patrimonio generado a partir del trabajo agrícola del entorno que se puede observar en la morfología del paisaje.
Se puede complementar con el Itinerario megalítico y de la piedra seca II, con el que comparten un mismo tramo.
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TipologíaCircular horario
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DificultadFácil
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Duración1 hora 20 minutos
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Pendiente166.00 meters
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Distancia4.40 km
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TemaMedio ambienteArquitectura y medioPaisajístico
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ActividadA pie
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Valoración
Gráfico de pendiente
Descripción
Dólmenes y menhires en el pla de la Casa Cremada
Empezamos la ruta enfilando por una ladera en la que aún sobreviven algunos bancales activos de olivares ganados a través de bonitos márgenes de piedra seca. A media subidita nos sorprenderá el primer elemento megalítico de la jornada, el dolmen de la Creu d'en Cobertella, que descansa justo al lado de las ruinas de la masía que tomaba el mismo nombre.
Nos sumergimos en un paisaje de brote mediterráneo salpicado de pinos y alcornoques desarrollado a partir del abandono de los olivares que aún se pueden vislumbrar en medio de la vegetación natural. La piedra seca abunda y nos acompañará durante todo el itinerario: márgenes, muros, barracas...
Pasadas las ruinas de la Casa Cremada, nos acercaremos hasta uno de los menhires que toman su nombre. Iremos flanqueando por el camino de la Casa Cremada, haciendo una breve incursión en el Cau de la Guilla, para acabar subiendo hasta la próxima cresta y al Cap del 'Home, donde podremos visitar los dólmenes del Llit de la Generala y del Cap de l'Home, muy cercanos el uno del otro.
Continuaremos siguiendo un entramado de caminos de flanqueo, ascenso suave y rodeados de piedra seca para adentrarnos plenamente en el paraje del Pla de la Casa Cremada, donde iremos viendo, uno tras otro, otro de los menhires que toman el nombre de la Casa
Cremada, las ruinas de una supuesta iglesia de origen prerrománico, el dolmen y el último menhir de la Casa Cremada y un bello ejemplar de barraca de piedra seca, símbolo del campesinado desde no hace muchos años.
Una breve incursión hasta el filo de la cresta de la Alzeda nos permitirá gozar de la panorámica hacia el valle y la masía de la Alzeda, así como del Puig de l'Àliga, que nos quedará justo delante nuestro, en la parte superior de la otra vertiente del valle.
Una vez llegados al menhir de la Casa Cremada II, podemos optar por abrir el Itinerario megalítico y de la piedra seca y así acabar de ver otros elementos y perspectivas rehaciendo el camino de la cresta de la Alzeda y volviendo por el valle de la Quarantena. Si no, solo será necesario continuar el trazado hasta el próximo cruce de la Casa Cremada donde desharemos el primer tramo de camino seguido hasta aquí al empezar el itinerario.
Consejos
TRAZADO
- Es un trazado más bien pedregoso pero que combina sabiamente las subidas, la llanura y el descenso. Solo haremos dos tramos cortos de subida continuada, al principio hasta las ruinas de la Casa Cremada y al repecho para trepar al hilo de la cresta de la Alzeda. El resto es flanqueo, terreno llano y descenso.
- Hay breves tramos del trazado que son incursiones de ida y vuelta para visitar algunos de los elementos de interés. En ningún caso tendremos que recular demasiado.
- El tramo de ida y vuelta al Cau de les Guilles, es, además del fuerte descenso que después se tendrá que volver a subir, un difícil sendero y de terreno muy irregular donde se tiene que estar atento a los posibles resbalones.
- Podemos combinar este trazado complementándolo con el Itinerario megalítico y de la piedra seca II, que comparten algunos de los puntos de interés. En este caso, al llegar al punto de interés del menhir de la Casa Cremada II, abrimos el Itinerario mencionado y lo empezamos a seguir desde aquí, ahorrándonos tener que bajar hasta el inicio para después rehacer el mismo tramo, con puntos de interés que ya habremos visitado. Aun así, volveremos a pasar por algunos de los puntos recientes, rehaciendo una parte del camino, pero vale la pena ya que pasaremos por el hilo de la cresta de la Alzeda bajando después por el valle de la Quarantena, con puntos de interés nuevos y nuevas perspectivas y paisajes.
AGUA
- Llevad agua: ¡no hay ninguna fuente en todo el camino!
PRECAUCIONES
- Al borde de la cresta de la Alzeda, tened cuidado de los niños, ya que hay acantilado.
METEO
- Hay que evitar los momentos de máxima insolación. Casi no hay sombra.
- En todo caso, protegeos siempre con crema solar. El terreno es bastante soleado.
- Se trata de una zona donde a menudo sopla la tramontana. En caso de que sople muy fuerte, no se recomienda salir al aire libre. Además de que es peligroso para vuestra estabilidad, pensad que tampoco acabaréis de disfrutar suficientemente del momento, por las molestias que ocasiona el viento fuerte.
TERRENO
- Menos en el empedrado y el fácil camino del principio, la mayoría de los senderos por los cuales se camina son bastante pedregosos e irregulares. Hay que hacerlos con el calzado adecuado, de suela gruesa y caña alta.
- En algunos tramos cortos, es fácil resbalar o sufrir alguna torcedura de pies y tobillos, debido a la irregularidad de los caminos.
MATERIAL
- Los bastones de trekking nos dan una mejor estabilidad en terrenos pedregosos.
- En caso de viento, se recomienda el uso de chaqueta cortaviento.
OTROS EQUIPAMIENTOS
- La ruta está señalizada y contiene placas informativas, aunque pueden haber desaparecido o estar dañadas.
